Este fin tuve la noticia de varias recaídas de compañeros de la clínica en la que lleve mi proceso, y trabajamos un poco el tema del “proceso de recaída“. La verdad es que es un tema bastante amplio y que muchos no entendemos aún al cien, y me agrego porque pareciera que a pesar de ser yo quien a llevado el tratamiento y tengo las herramientas necesarias, aún me cuesta aceptar muchas cosas y darme cuenta de varias otras.
Aún personas a mi alrededor me hacen comentarios como “Solo necesitas fuerza de voluntad”, “Es solo que quieras echarle ganas”, “Deja de pensar que vas a recaer” y se que me lo dicen porque me quieren y están preocupados; pero ojalá fuera tan fácil como eso. Si mi voluntad no fuera tan enferma y necia y mi cabeza no funcionara tan llena de TOC’s, tal vez si sería cuestión de querer, no lo sé, quizás solo me este justificando, pero aún no entiendo porque me cuesta tanto hacer las cosas y aceptar cuando las cosas no están bien.
Entinedo que para una recaída hay un proceso antes, “tendemos la cama“ como dicen por ahí, que nos lleva a nuestro consumo, y es raro, pero de verdad no me di cuenta que mi cama estaba casi tendida. Este fin que se habló me cayó el 20 y entendí lo que estaba haciendo, y agradezco tener mi grupo, porque para eso funciona ir a uno, para abrir los ojos en cosas que igual y no estás viendo o no quieres ver.
Ahora solo me queda aceptar lo que he estado haciendo, afrontarlo y cambiar mi camino. Estoy a tiempo de evitar mi recaída y está en mis manos. No va a ser nada facíl pero se que puedo, porque ya lo hice.
Si les está costando, si sienten que algo anda mal, de verdad y de corazón, bu un grupo, busquen ayuda, hablen con alguien que entienda el proceso en el que están y van a lograrlo.
No no estamos solos, es cuestión de buscar a la familia que la vida en recuperación nos da.
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